Arené los interiores y bordes de las puertas, el capó y el maletero, pintando todo esto con una pintura que supuestamente convierte el oxido de hierro a una substancia inerte. Dentro de las puertas estoy pintando un “emborachimiento” negro que penetrará hasta la última esquina, absorbiendo los sonidos y dando un poco más de protección contra la humedad. Afuera estarán listas para ser terminado normalmente.
Aproveché la arena para limpiar el herrumbre dentro de las aletas de ventilación del capó. Después me di cuenta que esta pintura no es lo que pensaba y no puede ser cubierta con pinturas automotivas. Tendré que lijarla de nuevo.
Para asegurar que no tenga herrumbre detrás de las bisagras, saqué un destornillador de impacto que compre en el año 1962 para reparar mi Studebaker del año 54. Con dos o tres golpes del martillo pudo remover las bisagras. Tuve que reparar una, ya que no tenia su eje.
Aquí se ve el armazón de los faroles y su arenado. Tengo que soldar un parche a ambos donde fueron perforados por herrumbre.
Ya seleccioné el color final para la carrocería. La pintura original, aunque probablemente descolorida por 47 años de sol, está a la izquierda. La pintura que usaré (a la derecha) es un poliuretano de color perla metálica Turquesa Glamour que fue usado por la General Motors en los años 90. Buscaré un blanco perla o blanco perla metálico para el techo.
No se había pintado el “túnel” o tapa que corre debajo del piso para cubrir la varilla de la transmisión y los cables ni unas cuantas piezas más. Ademas encontré que muchas piezas que fueron pintadas por el asistente del chapista fueron pintadas sin enderezarlas. Decidí enderezarlas y pintarlas de nuevo, tomando la oportunidad de retocar las suspensiones donde se rayaron en el ensamblado. La herramienta que se ve es un pedazo de angular de media pulgada soldado a un tubo para agarrar. Entra bien en el canal para una base del martillo.
El medidor de gasolina tiene mucha herrumbre. Usaré lo que necesito de flotador y tubos en combinación con piezas de uno del 1961. (después de hacer varios arreglos, terminé comprando un medidor nuevo para un Chevrloet 56 y modificandolo para tomar la misma forma. Detalles aquí) La bomba de gasolina está podrida, entonces compraré una eléctrica.
También llegó la hora de fabricar el tanque de gasolina. Después de cortar la parte dañada lo dimos la forma y la usamos como molde para una parte nueva. Doblamos la plancha y soldamos los dos costados para después soldar esa mitad a la parte superior que arené para eliminar la herrumbre. La última foto muestra la parte nueva parcialmente soldada a la parte superior para probar en el auto antes de terminar. Ahora buscaré pintura epóxica para pintar adentro.